Me da la impresión que el tema de la Automedicación no lo tienen bien integrado las administraciones sanitarias. Se siguen realizando campañas divulgativas, donde el tono negativo y regañón es el único mensaje que se efectúa al abordar este tema.
El autocuidado, y dentro de él, la automedicación es un fenómeno común y enmarcado en el comportamiento humano desde el principio de los tiempos, adecuado cuando se realiza bajo condiciones de conocimiento y seguridad correctos.
En el libro que escribí en 1996: Sin receta, la automedicación correcta y responsable, incluí esta definición sobre el autocuidado y la automedicación. No efectuar ninguna diferenciación entre un uso incorrecto de los medicamentos (abuso o infrauso) y un autocuidado bien efectuado con medicamentos adecuados para ello, provoca la demonización del cualquier actividad de automedicación, dando un mensaje de medicodependencia que no es el adecuado.
El cartel asturiano llega aún más lejos. Mezclando en la torre de cajas medicamentos que pueden ser adquiridos sin receta y otros que la requieren, hace un flaco favor a este concepto. Analgésicos simples y varios antihistamínicos pueden comprarse sin receta y el paciente puede saber perfectamente en qué contexto usarlo. Por supuesto, los antibióticos no están disponibles para la venta sin receta. Afortunadamente, en la actualidad se respeta la legislación. Y los mucolíticos ¿son un peligro para la salud si se automedican? Parece que no.
El abuso o el mal uso de los medicamentos no es lo mismo que automedicación. La automedicación sencilla en patologías básicas -véase el simple catarro- debe ser fomentada. La educacion sanitaria consiste en ayudar al paciente a cuidar y mejorar su salud, no solo preventivamente sino también curativamente. Y para eso no hay que regañar, sino ayudar mediante hojas de información bien diseñadas y campañas en los medios de comunicación. Sería recomendable que cuando se habla de abuso o mal uso de los medicamentos no se usara el término automedicación y empleáramos éste al hablar de autocuidado responsable.
Está bien lo de la automedicación responsable, pero lo que ocurre es que la gente ya no tiene en su casa ni botiquín ni lo mínimo para curarse cosas banales ( para éso está urgencias), por no decir algún libro como tenía mi madre " Tu hijo" que nos apañaba sin ir al médico la mar de bien. Y de todos modos si tienen que venir a por el dichosos justi p'al trabajo, para qué me voy a tomar nada por mi cuenta si me va a ver el médico...
ResponderEliminarTiene razón May, tenemos una carencia en los autocuidados (lo mismo que en los idiomas), fruto de la nesciencia y del miedo interesadamente fomentado (“¡vaya rápido… corra… no espere… lo suyo puede ser grave…!”).
ResponderEliminarEn un intento de impulsarlos, me planteé en su momento la elaboración de folletos informativos. Aunque me temo, amigo Vicente, que en
vano.
http://medymel.blogspot.com/2009/10/educacion-sanitaria-mediante-folletos.html
Estoy totalmente de acuerdo con usted. Hay que decir las palabras por su nombre, una parte de esta desinformación parte de los medios de comunicación. Le felicito por la magnifica tarea de divulgación que realiza. Un saludo.
ResponderEliminarDr Leo Cerrud
Tampoco es buena idea lo de tenr un botiquín. Alguno se cree que el botiquín se lo tiene que pagar su Servicio de Salud. No sería el primer paciente que me pide Sulfadiazina argéntica para tener en casa.
ResponderEliminarYo le explique que yo mismo no tengo en casa dicho producto y que si lo quiere tener por que sí debe pagarselo.
Pues bien, se cambia de medico a otro que se lo dé.
Ya no hablamos de los casos raros (los hay) de farmacias que dan mucolíticos y analgésicos y le dicen al usuario lo de "ya me traerás la receta".
Un ejemplo más de cosas en las que todos los médicos del SNS deberíamos actuar siempre, siempre, siempre igual.
El Corte Ingles funciona por que si el usuario no respeta las normas (comportamiento y pagar para llevar algo) se le echa del establecimiento. En nuestras respectivas empresas, salvando las disancias, pasa lo mismo... que no funcionan por que no hay respeto a las reglas de juego.
"El autocuidado, y dentro de él, la automedicación es un fenómeno común y enmarcado en el comportamiento humano desde el principio de los tiempos, adecuado cuando se realiza bajo condiciones de conocimiento y seguridad correctos." Yo soy médico y entiendo perfectamente que significa ésta frase y te pregunto: si utilizo un "inocente" mucolítico para "tratar" una neumonía incipiente, no estoy corriendo un riesgo innecesario? No te enfades por el regaño del aviso, es muy pertinente, la mayoría de los que se "automedican" no tiene idea de lo que hacen. Saludos.
ResponderEliminarP.D Se equivocan los médicos...vamos!
No defiendo los mucolíticos, inútiles casi siempre.
ResponderEliminarLo peligroso no son los mucolíticos ni los anihistamínicos ni el vademecum completo. Lo peligroso es que alguien que no está capacitado para utizarlos correctamente crea que sí puede y se automedique ( o que cómo también ocurre, automedique a terceros). Eso es peligroso y hay que decirlo claramente. Saludos.
ResponderEliminarCarlos, la causa mas frecuente de muerte en adultos jovenes en España es el accidente de trafico....espero como medico no tener que llamar nunca al profesor de la autoescuela para que me lleve al trabajo todos los dias...
ResponderEliminarTodos los dias veo pacientes adultos responsables y perfectamente capacitados para tomar la decision de tomarse un paracetamol para un resfriado...Pero vienen muertos de miedo por si....por que la sociedad (medicos, periodistas, politicos) los hemos "acojonado..
Vicente, una vez más no puedo estar más de acuerdo con lo que dices. El autocuidado pasa por responsabilidad: en lo que comemos, en conducir de acuerdo a las normas, etc. No acabamos de inventar la farmacoterapia ¿ o las cataplasmas de hace años eran cosas de brujería? Un analgésico para un dolor de cabeza, con la suficiente información y comunicación (uno decir y otro entender) dada por el farmacéutico, es como yo entiendo la automedicación responsable. Si el paciente polimedicado con digoxina y Sintrom no es 'cuidado' por todos los sanitarios que intervienen, qué 'autocuidado' responsable puede haber. Lo demás son campañas des-informativas que solo sirven para entregar dinero a las agencias de publicidad.
ResponderEliminarDe acuerdo totalmente con el blogger y la mayoría de los comentarios. El manejo adecuado y directo de ciertos recursos terapéuticos farmacológicos y no farmacológicos en situaciones banales, forma parte de la autonomía personal deseable. Autonomía que por cierto, se limita por la enfermedad. Así decimos que estamos más enfermos, al menos en términos subjetivos, cuanta más autonomía perdemos, aunque sea durante unas horas por una gastroenteritis por norovirus.
ResponderEliminarInformaciones como las que comentamos, consiguen que alguien pierda más autonomía, sometiéndose necesariamente a la prescripción facultativa, de la que pierde por la propia enfermedad.
No importa si somos servicio sanitario, educativo, social, de seguridad... Parte de nuestra obligación como servidores públicos, es proporcionar a personas y colectivos los servicios que no pueden procurarse por sí mismos, a la vez que fomentar y restablecer su autonomía en todos los aspectos.
Todos tomamos decisiones relevantes, irreversibles, incluso críticas muchas veces a lo largo de nuestra vida. Asumimos que somos capaces de hacerlo y lo hacemos con normalidad. Y tomar o no un comprimido de paracetamol, no es una de ellas. Tal y como está el patio, quizás deberíamos haber consultado ¿y a quién? si firmar la hipoteca o comprar el coche
Dr. Carlos A. Medina, es posible que algún paciente no sepa usar adecuadamente ciertos medicamentos OTC básicos. Hace décadas que no lo hace, sobre todo con sus hijos, porque nosotros le hemos convencido de que no debe hacerlo. Aunque nuestras madres lo hacían con naturalidad, incluso sin manual. También puede equivocarse sobre pedir o no consejo sanitario o en qué momento hacerlo. Y no por ello le decimos, aunque casi, que acuda cuando sea y por lo que sea a su médico.
Pero somos los propios servicios, sanitarios españoles en este caso, quienes individual o corporativamente, dependiendo del caso, establecemos recomendaciones, normas o procedimientos (prescripción facultativa obligatoria, burocratización, medicalización de periodos y eventos vitales normales, ineficiencia en la gestión clínica...), que mantienen a veces innecesariamente pegados a nosotros a los ciudadanos. Es entonces cuando mermamos su autonomía en lugar de potenciarla.
Paradójicamente, después nos quejamos de tener unas tasas de frecuentación y una medicamentalización de la factura sanitaria mayor que nuestros países pares. Por no hablar del disparatado coste oportunidad que supone dedicar todos esos recursos, incluido el tiempo médico, a actividades prescindibles, cuando no desaconsejables.
Perdón por la extensión y saludos.
Toni Bayón
Excelente comentario. Toni.
ResponderEliminarSaludos
Muy de acuerdo Toni, nuestras madres, abuelas, tías, nos daban unos preparaditos sencillos, yuyitos casi siempre inofensivos, que lo que permitían era el curso normal de algún proceso banal. Ahora, si de los niños hablamos, recuerda que la polivacunación introduce unos cambios que hace 35 años no existían.En algunos casos, suprimir la fiebre con un paracetamol puede ser más pernicioso de lo que supones, si es que sabes de esa posibilidad claro, sino no existe. En adultos polimedicados, los efectos de la misma de por sí es grave; si agregas más desde la ignorancia del automedicado, se agrava. Ocurre que casi siempre se omite el dato. Cuándo sale mal, la culpa la tiene el gato. Saludos.
ResponderEliminarDr Carlos cree usted que acudiendo al medico al primer síntoma se ha solucionado todo?
ResponderEliminarComo medicos debemos saber que es muy difícil identificar una enfermedad cuando aparecen sus primeros síntomas, es mas, en la mayoría de las ocasiones cuando mis pacientes acuden rapidamente tras el primer estornudo les digo que hay que esperar para poder identificar el cuadro.
En la enfermedad( como en casi todo en la vida) hay que aplicar el sentido común, y lo que hacían nuestras madres era eso e iban al medico cuando consideraban que la cosa no iba bien.
Carmen, si has entendido que se debe consultar al primer síntoma, bueno, en ningún lugar digo eso. Al contrario, entiendo que dándole luz verde a la automedicación sí caes en eso. Y recuerda que nuestras madres disponían de tiempo, sabían observar a sus niños y muchas también, no contaban con servicios médicos como hoy.En medios muy carenciados, las mamás no llevan a sus niños por diarreas y deshidratación progresiva a la consulta hasta que se comienza a afectar el sensorio del lactante, o sea, que la cosa no vá bién cómo tu bién dices al final. Saludos.
ResponderEliminarHe ahí la clave, la aplicación del sentido común del que habla Carmen, de la prudencia o la sensatez. Y tomar una decisión terapéutica motu proprio, no implica necesariamente administración de fármacos, pues bastarían la mayoría de las veces medidas físicas o higiénico-dietéticas, o si me apuras los intemporales “remedios de la abuela”. En una diarrea, en una tos irritativa, en una fiebre inicial sin síntomas de alarma, en tantos procesos menores que alarman a nuestros desvalidos pacientes, por los que acuden a diario a consulta y no pocas veces “de urgencia”.
ResponderEliminarPero los tiempos han cambiado, porque el mercado los ha hecho cambiar introduciendo el factor miedo como estrategia de inducción al consumo. Nada que no se sepa. Compruébese el bombardeo publicitario y los flases alarmistas en los medios. Ha ido disminuyendo o perdiéndose la capacidad de decisión, lo que al cabo significa merma de la autonomía personal. Al final todo pasa por la información juiciosa, la educación general, la seguridad individual y el fortalecimiento del propio criterio. Un reto de cara a la comunidad y una noble aspiración, aunque parezca utópica.
José Manuel, de acuerdo contigo, pero fíjate que no es el mercado quién introduce el miedo y la alarma injustificada sino que, cómo con la pandemia de 2009, fue la propia OMS, recuerda la presidenta de OMS, leyendo los "avances" de la pandemia,la que actuaba sobre los mercados, es decir, los consumidores y administradores(médicos)y la industria hombre!!,los medios y los miedos, los gobiernos comprando masivas dosis de antivirales,con casos de muertes casi fulminantes, con conteos diarios de muertos, y tu me hablas de sentido común, información juiciosa. La automedicación es peligrosa y hay que decirlo claro. No puedes pedirle a la comunidad que asuma tal actitud frente a los escenarios que se le presentan cotidianamente.O te pregunto, hubieras tomado paracetamol por una fiebrecilla en medio de la pandemia de 2009? Saludos.
ResponderEliminarCarlos, las decisiones técnicas de la OMS influyen en los mercados –o en el mercado global–, igual que las decisiones políticas. Luego los consumidores serán atraídos hacia ellos, tentándolos con sus encantos o convenciéndoles de que les conviene (por economía o por salud). No está mal la transposición de medio por miedo.
ResponderEliminarRespecto a la automedicación, fuera de lo que se entiende o admite como fármacos de obligada prescripción médica, no hemos de ser inflexibles. Todo en esta vida entraña peligro; es tan mala la automedicación absoluta como la dependencia extrema.
Recomiendo la lectura de un artículo sobre “fármacos sin prescripción médica”, que me parece muy válido, aunque sea el capítulo de un libro informativo dirigido a profanos y avalado por la industria farmacéutica:
http://www.msd.es/publicaciones/mmerck_hogar/seccion_02/seccion_02_013.html
Saludos.
Estimados compañeros. Con este último comentario doy por cerrada la discusión.
ResponderEliminarGracias a todos.