Nunca digan a nadie que si ha olvidado alguna gestión, ha faltado al trabajo por algún motivo, no han podido presentarse a un examen o cualquier tipo de incidencia, que acudan a su médico para que les haga un justificante de que estaban enfermos y de esa manera librarse de las consecuencias de sus actos o de sus propios problemas que han motivado la ausencia del trabajo, la no realización de un examen o se han olvidado de fichar en el registro del desempleo.No ofendan al médico solicitándole que mienta. Si consideran que eso no es ningún problema, envíen a las personas afectadas a otras instituciones públicas a que justifiquen una mentira, como puede ser el Juzgado de Guardia, la Guardia Civil o la Comisaría más cercana.
Páginas
▼
miércoles, 24 de junio de 2009
El respeto
Éste es un comentario dirigido a los responsables de instituciones como el Instituto Nacional de Empleo (INEM), Autoescuelas, Departamento de Recursos Humanos de distintas empresas y cualquier otra persona que haya pedido alguna vez un justificante médico falso:
Bravo, más claro no lo podías decir. En mi facultad los profesores decían que les daba igual el justificante médico, que si uno no hacía el examen no lo hacía y punto, a la siguiente convocatoria. Ya está bien de usar al médico de cabecera como rellenador de papelitos.
ResponderEliminarGenial, Vicente, como siempre. Lo que planteas es, como bien dices, una cuestión de respeto. Respeto que se ha perdido hacia los profesionales de la salud. Respeto, en definitivo, que todos estamos perdiendo por el trabajo ajeno que está a nuestro servicio como ciudadanos. Una muestra más de los efectos de la medicalización de la vida...
ResponderEliminarGracias
Gracias por vuestros comentarios. Es que es bastante alucinante que tengamos que soportar ciertas imbecilidades.
ResponderEliminarSaludos
Felicidades. Imposible más corto y contundente. Lo pongo en mi consulta....
ResponderEliminarEstimado blogamigo: La prueba irrefutable de que los médicos (los de atención primaria claro) somos como las izas, rabizas y colipoterras del loable SNS, es entre otras la incitación a la mentira (prevaricación diría yo) de dichas administraciones o entes privados... total por un papelito que haga el médico. No veo yo a semejantes organismos intentando mancillar el honor de un señor cardiólogo o cirujano...
ResponderEliminarTe pongo otro ejemplo, de esta mañana: "Sobre la mesa de mi consulta, 3 cartoncillos de AINES y 2 de IBP, distintos entre ellos. Hágame los cinco, pues los cinco me van bien. Y no me cambie la marca, pues son los que me van bien. Primer intento: Mire esos medicamentos cumplen igual función entre ellos y tomarlos juntos provocarán efectos indeseables y graves para su salud. Le he dicho que los cinco, pues los cinco me van bien. Tal y cual me lo recetó Don... (afamado reumatólogo), el otro en urgencias y los otros dos Doña... (no afamada, pero en vías de serlo, ginecóloga): Unos son para la rodilla, el otro para el estómago y los otros dos para mis "cólicos uterinos" --->inciso, juró que en 17 años de médico no había oído ese diagnóstico.
Pero sigo: Segundo intento. Mire los AINES hacen un papel similar y con uno de ellos, el que usted prefiera (condescendiente yo) se le aliviará su proceso en la rodilla y en el ¿útero?. Ah y con un protector gástrico sobra.
En ese momento cual clienta insatisfecha con su servidor de cabecera, recoge los cinco cartones, se pone de pie (toma paralenguaje) y me los suelta encima del teclado del ordenata. He dicho que los cinco y su obligación es recetar los cinco.
Tercer y último intento: Mire mi ética y el cuidado de su salud, me impiden recetar todo eso. Así que elija o me veré obliagado a no recetarle nada. Respuesta airada: si usted supiera de ética estaría en la universidad o en tribunal, no haciendo recetas.
En mi tierra de origen, estas cosas se hacían a oscuras en un barrio de mal ver y peor vivir (la "Manigua") y le pagaban a uno/a por los servicios prestados.
Hoy he sido puta(mil perdones) pero almenos no he puesto la cama. Un abrazo y enhorabuena por el peazo de blog.
Es uno de los actos que, aunque me lo proponga, acabo enfadandome conmigo y con el mundo. Es coaccion dirigida a cometer un delito: falsedad en documento publico y para mas INRI, por parte de organismos publicos tambien. Puestos a que nos metan en la carcel que sea por un buen motivo: una estafa tipo Madoff, por ejemplo, no para cubrir las espaldas a terceros. Inaceptable y mucha pasividad al respecto en nuestro colectivo. No se que pasaria si denunciaramos esto en la prensa...
ResponderEliminarFelicidades por este magnifico blog
El problema es que nadie lo pide por escrito, si fuera así, lo denunciaríamos públicamente.
ResponderEliminarGracias a todos por los comentarios
Pues , veo que no es solo un mal de nuestros compatriotas .
ResponderEliminarSeguire oponiendome ferreamente a hacer un certificado trucho.
Silvia de Montevideo ,Uruguay .