Siempre me ha gustado la corrida de toros, desde la barrera por supuesto. El actual debate del Parlament de Cataluña ha provocado la aparición en los periódicos de excelentes artículos y razonamientos a favor y en contra de la "fiesta nacional", terrible nombre que ha justificado asociarla a los aspectos más vulgares y tópicos de España. El debate me parece excelente y artículos como el de Fernando Savater: Un abuso arrogante, es un buen ejemplo de una postura favorable a la libertad de decisión. Sin embargo, un artículo del novelista Francisco González Ledesma titulado: La memoria del llanto, me ha provocado una gran impresión. El efecto de la pica sobre los músculos cervicales del toro para evitar el cabeceo lateral peligroso para el torero, el cansancio del toro para reducir su empuje, las banderilla negras más profundas para el toro que "se lo merece por manso", etc. Un buen ejemplo de cómo la reflexión pública puede ayudar a la reflexión personal en un campo en el que es fácil quedarse en la superficie festiva y seguir la corriente mayoritaria.
http://rayitodeubrique.blogspot.com
ResponderEliminarQue esto nos sirva para saber que devemos de cuidar la fiesta, primero nosotros los aficionados,toreros,etz