Las campañas bienintencionadas para educar a la población no tienen fin. La Fundación Española del Corazón nos tiene muy acostumbrados a pensar en la alimentación como parte del abordaje del riesgo cardiovascular, por ello promocionan a Propollo y las Patatas de Abuelo entre otros delicatessen del mercado.
Un año más, y van seis, un grupo de afamados restaurantes y cocineros colaboran en la elaboración de un libro de recetas titulado "Menús con Corazón". Pretenden promover hábitos de alimentación cardiosaludable en la época estival.
Pero todo en la vida tiene truco, y una de las condiciones de "saludabilidad" de estos menús es que contengan nueces, muchas nueces. Para ello, el cocinero Alejandro del Toro nos propone orxata salada de nuez con berberechos, mero al all cremat de nueces y tinta de calamar y helado de leche merengada con nueces garrapiñadas y manzana. No dudo de su "cardiosalubilidad", ya que los menús han superado la evaluación de los cardiólogos de la Fundación según nos cuentan en la noticia, pero un poco empachante de nueces si parece ¿no?.
¿Y cuál es la razón de tanta nuez? ¿Es que ayudan a bajar los Omega 3 el colesterol? ¿Es que este fruto seco, fuente de Omega 3, va a salvar a la humanidad del riesgo cardiovascular y la Fundación ha encontrado la misión de anunciarlo al mundo?
La principal razón es que la empresa Nueces de California (California Walnuts) es la que paga la edición de estos libros y su condición debe ser que sean cardiosaludables, sí , pero con nueces para todo, que para eso pago.
El mito de los Omega 3 sigue vivo a pesar de que ninguna evaluación haya demostrado que aportan algo significativo a la salud. Desde la revisión sistemática de 2006 del BMJ: Risk and benefits of Omega 3 fat for mortality, cardiovascular disease and cancer: a systematic review a la revisión Cochrane publicada en 2008, ninguna ha encontrado en los numerosos ensayos, evidencias claras para la salud que aconsejen usar como medicamento o dietéticamente fuentes extra de Omega 3. Por ello, usar este argumento para promocionar alimentos que tengan en si mismo Omega 3 o estén enriquecidos con dosis extra de estos ácidos grasos no tiene ningún fundamento.
Por cierto, los Omega 3 como fármaco baja los triglicéridos y puede aumentar el LDL-colesterol. No sigan por ahí.
Nota: Un compañero me referencia un artículo sobre nueces y lípidos, donde se evidencia descenso de distintos lípidos http://archinte.ama-assn.org/cgi/content/short/170/9/821
Las revisiones anteriormente citadas se refieren a efectos en salud, no solo en datos intermedios metabólicos.
Como siempre "al loro" con la actualidad médica y saludable, envidiable sin duda y admirable por supuesto.
ResponderEliminarSi los médicos -en mi caso- a veces no sé que infomación creer, entre tanta que circula por internet y a veces dificil de analizar, la tarea se hace más dificil para una persona que busca infomación sin ser experto en el tema.
Quizás dentro de poco en las consultas por si nos aburrimos: doctor puedo tomar nueces para bajar el colesterol?
Este artículo de la Arch Intern Med, habla de lo mismo pero un poco a favor.
http://archinte.ama-assn.org/cgi/content/short/170/9/821
Al final me quedo con la sabiduría popular que con los millones de años en esta galaxia algo hemos aprendido; como muy lo explica el dicho: "Mucho trato, poco plato y mucho zapato" o algo así.
Un saludo.
Gracias. Introduzco un comentario en la entrada.
ResponderEliminarUn cordial saludo
En mi infancia pueblerina no había más "chuche" que cacahuetes con cáscara. Mi madre, para animarme a ir a ver a mi abuelo, me decía que me iba a comprar garbanzos tostados. Ahora resulta que estas cosas son saludables, quizás porque los niños ya no los quieran. Y es que el tren siempre pasa con retraso.
ResponderEliminar... ¿y qué daño hace introducir las nueces de forma moderada en la dieta? ¿es mejor tomar medicamentos? ... vamos, hombre... venga ya...
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